Dios. La ciencia, las pruebas. El albor de una revolución, abre debate sobre la relación entre ciencia y fe entre académicos y universitarios
La comunidad académica de la Universidad Anáhuac campus norte participó este 3 de diciembre en un diálogo abierto sobre el papel de la ciencia, la fe y las grandes preguntas humanas, durante la presentación del libro Dios. La ciencia, las pruebas. El albor de una revolución.
El encuentro reunió a estudiantes, profesores y especialistas de diversas disciplinas, quienes abordaron el contenido del texto desde perspectivas científicas, filosóficas y formativas.
Un debate universitario sobre ciencia, creencias y sentido humano
El Dr. Carlos Cuevas Covarrubias, profesor e integrante de la Asociación Mexicana de Estadística, abrió el encuentro con una reflexión que resonó entre los asistentes:
“¿Es la ciencia incompatible con las creencias religiosas? Yo creo que no. Y esa respuesta se vuelve más racional cuando leemos lo que plantea este libro”.
Cuevas destacó que el texto invita a revisar críticamente la idea de que la ciencia puede responder todas las preguntas sobre la naturaleza y el universo. Señaló que ciertos límites —como el fin o el porqué de las cosas— exigen una mirada más amplia.
“Tenemos que leer este libro con razón abierta, y con una visión multidisciplinaria que incluya filosofía y teología”, afirmó.
El académico subrayó que los autores sostienen que la ciencia contemporánea ha descubierto indicios de un origen inteligible y ordenado del universo, y que vale la pena analizar cómo esta perspectiva dialoga con la historia de la ciencia y con la formación de paradigmas materialistas en los siglos XIX y XX.

Una lectura situada en la crisis cultural actual
El Dr. Óscar Perdiz Figueroa, responsable de formación de la Sede Mexicana del Instituto Juan Pablo II para la Familia, abordó el libro desde el contexto de las ideologías contemporáneas.
“Vivimos una triple crisis: del pensamiento, del carácter y de la desconexión”, afirmó.
Destacó que uno de los capítulos más llamativos analiza el funcionamiento de las ideologías y su tendencia al reduccionismo.
“El materialismo es un reduccionismo. Y los regímenes que llevaron ideologías al extremo lo hicieron de forma violenta”, señaló.
Asimismo, advirtió sobre las formas actuales de manipulación emocional mediante argumentos pseudocientíficos, fenómeno que el libro ayuda a cuestionar.

Elogios a la claridad del texto
El Dr. Peter Mullan, catedrático de la Universidad Anáhuac, calificó la obra como “una obra maestra” y compartió la valoración de su padre, astrofísico:
“Es el libro más claro sobre ciencia y fe. No se encuentran textos tan contundentes en su propuesta”.

Aunque reconoció que falta un puente explícito entre la ciencia y la filosofía, resaltó su contribución a la divulgación científica:
“La ciencia no puede demostrar la existencia de Dios, pero sí ofrece indicios. El libro muestra esos indicios con enorme claridad”.